“Llegamos a Jerusalem bajo una luna llena. A pesar de mi cansancio, Jerusalem y sus grandes contornos a la luz de la luna me causaron una profunda impresión. La silueta de la fortaleza de Sión, la ciudadela de David - ¡magnífica! Las calles estaban llenas de vida con judíos paseando a la luz de la luna.
En la mañana, desperté aliviado. Pero aún estoy muy débil.
Ahora es de tarde y no me he movido de la casa. Todo lo que puedo hacer es mirar por la ventana y llegar a la conclusión que Jerusalem está magníficamente situada. Incluso en su decadencia actual, es una ciudad hermosa; y, si lo logramos, puede convertirse en una de las más bellas del mundo”.
Jerusalén, 29 de octubre de 1898.
Fragmento de “Los diarios de Theodor Herzl”, Editado y traducido por Marvin Lowenthal
A continuación, el video que realizamos para festejar en 2007 los 40 años de la reunificación de Ierushalaim.