Después de estar estos pocos días en Israel, y haber venido desde Polonia, entendemos... Entendemos lo que pasó, entendemos cómo logramos tener el país en el que estamos parados hoy y entendemos que somos afortunados de tenerlo.
Brenda y yo estuvimos en Israel en diferentes oportunidades, con diferentes planes y a pesar de todo, creo que coincidimos casi plenamente en que cada vez que uno vuelve a pisar Israel, es como si fuese la primera vez
Siempre hay algo nuevo que ver, siempre hay cosas nuevas que descubrir, un grupo diferente con el que viajar, y este viaje es más especial al entender cómo después de
Y como dijimos, cosas nuevas, lugares nuevos, costumbres que vemos, que sentimos, comidas nuevas que olemos
Hoy nos levantamos como un día más, para nosotros es un día más, pero para el israelí que está caminando al lado nuestro no, hoy es un día difícil, de dolor, de recordación.
Hoy en Israel se conmemora Iom Hazikaron, se recuerda a todos y cada uno de los 23.169 soldados que cayeron en las guerras, y como dijo la guía que está con nosotros en Israel, "Todo israelí conoce o tiene un familiar que falleció en la guerra".
Es duro ver las caras de la gente, uno prende la televisión y no hay música de festividad, todos los programas hablan de este día, como si no hubiera nada más, como si solo importara esto, como si ese soldado fuera parte de cada uno a pesar de que por ahí uno no lo conoció pero lo siente parte.
Es difícil comprender cómo pasan de la tristeza a la felicidad en un día, y no estoy hablando de una frase hecha, sino que hoy a la noche comienza el día de recordación a los soldados y mañana a la noche termina y un segundo después comienza Iom Haatzmaut.
Esperamos que al escuchar la alarma que suena hoy a la noche un minuto y mañana por la mañana dos minutos, sentirlo, pensar en nosotros, en ustedes, en la vida y en la muerte, y pensar que nosotros estamos vivos, vivos para recordar, vivos para estar hoy en Israel codo a codo con miles de personas conmemorando y festejando, porque eso es la vida, esta llena de alegrías pero también de realidades no muy lindas, y hay que aceptarlas como lo hace hoy todo Israel.
Les mandamos un saludo muy grande desde Israel Brenda Duchowna y Matías Bomse.